viernes, 27 de diciembre de 2013

Apatía


Apatía, es el más peligroso contrincante que puede tener un deportista. La apatía no es pereza, no es cabreo, no es tristeza, no es decepción, no es disconformidad, no es desacuerdo...
La apatía es no ser.
Quizás sea lo que buscan los budistas en su meditación, cuando precisamente quieren disociar el cuerpo de la mente, o esa evasión de la realidad que todas las religiones buscan en sus oraciones, algo tiene de todo eso.
Y tan difícil es saber meditar y evadirnos, como escapar de la apatía cuando es ella la que nos imbuye y no somos nosotros los que la buscamos.
La apatía nos puede llegar temporalmente por una lesión, por una situación dramática cercana, por un cambio en nuestros objetivos, por una situación social, o por el simple cansancio. Alcanza a la mente o al cuerpo y de la una pasa a la otra, abrazando conjuntamente a todo nuestro ser fundiéndolo en la más terrible de las tiranías.
Tanto es así, que cuando queremos fastidiar a alguien solemos teatralizar la apatía, frente a ellos.

¿Porque hablo de la apatía, en este blog sobre la vela (o la vida)? Porqué en lo contrario de la apatía está el alma de la competición: la emoción y la motivación, estado del alma y del cuerpo que se funden para multiplicar las expectativas.

He buscado sin éxito un antónimo para la apatía, que funde sabiamente el estado inactivo de todo tu ser.

Por la apatía, te llegan derrotas aisladas, te llega la mala preparación y muchas veces el dejar el deporte.

¿Como escapar de la apatía? apunto dos cosas, aunque quizás vosotros tengáis más recursos:

  1. Creo que lo primero es dejar que no sea ella tu única compañera. Busca amigos que te contagien la emoción y motivación, compañeros que sepan que tu apatía está ahí y que te ayuden a alejarla. Al principio formará parte del grupo, molestará un poco, pero con tesón y mucho por tu parte entre todos se espantará, y rápido.
  2. Buscar tu lado más fuerte, la mente o el cuerpo para ponerlo en movimiento, y desde ahí hacer hueco poco a poco en todo tu ser.
La  apatía puede ser la ruptura de un ciclo necesario, de un cambio que no nos atrevemos a dar y nuestro ser se revela escapando. Entonces hemos de estar atentos al siguiente ciclo... porque detrás de una larga apatía esta la depresión.


Y es que nuestros mayores contrincantes siempre están en nuestro interior.

Emoción y motivación para el 2014.

domingo, 10 de noviembre de 2013

Tahab, nirvana, extasis...


Todos, todos hemos sentido alguna vez que el mundo se detiene por nosotros, que los pájaros dejan de cantar para escucharnos, que el sol nos ilumina solo a nosotros, momentos que recordaremos y que recordarán los demás. Quiero pensar que todos hemos tenido alguna vez un momento como ese, a quiero desear que todos tengamos alguno antes de morir. Momento de trascendencia, de eternidad, de  inmortalidad...
Ese momento llega en el trabajo, en las relaciones personales y también practicando lo que nos gusta. La prensa, los político y las religiones buscan vendernos esos momentos de eventos o situaciones que son lejanas a nuestros corazones y siempre como espectadores.

Ese momento no lo elegimos para nosotros, pero si lo podemos elegir para los demás. La vida en general, y la vela en particular, te ofrece muchas oportunidades para hacer sentir esa trascendencia a las personas que tienes al lado, familias, amigos o tal vez desconocidos.

Ten en cuenta como deportista, esos posibles momentos de compañeros y contrincantes, y sé esplendido, haz que unas palabras, un gesto, un simple detalle selle su tahab, su nirvana, su éxtasis...

sábado, 12 de octubre de 2013

Agárrate bien!!!

El pasado fin de semana hicimos una pequeña salida en bici por la collserola, Uno de nosotros iba en una bicicleta sin pedaletas; son un pequeño artilugio incorporado en los pedales donde meter el pie fijándolo al pedal. La mayoría de nosotros utiliza unas zapatillas que llevan un mecanismo que se une al pedal y que solamente con un giro brusco se despega.
Explico esto porque al compañero que no las llevaba se le hacía más difícil mantener el ritmo y el control de la bicicleta, y le comenté que haría un artículo: "Las pedaletas y el láser", he cambiado el título pero aquí va:

El estar estrechamente agarrado a la herramienta que utilizamos es vital para poder utilizarla mejor.
Fijaros en los asientos de los coches de competición, en las fijaciones de las tablas de windsurf, en los artilugios del manillar de las bicis de triatlón, y si afinamos fijaros en que cuando tenemos una buena herramienta en la mano una de las cosas que más agradecemos es poderlas coger bien, un buen destornillador, alicate, un bolígrafo, incluso cuando usamos un teléfono móvil agradecemos que se pueda coger bien.

¿Porque?, hay estudios que explican que los humanos llegamos a sentir las herramientas como un apéndice de nosotros mismos, para sentirlo así es importante que la unión entre la herramienta y nosotros sea lo más efectiva posible.

Si extrapolamos esto al barco, concretamente al láser, hemos de sentirnos estrechamente agarrados a él.
Como no podemos modificar el barco, si que podemos cambiar la forma de colocarnos y posicionarnos en él para sentir que el barco es parte de nosotros mismos y no al revés.

Los pantalones duros ayudan a esto en las ceñidas, tres puntos de apoyo en el barco, las cinchas, los gemelos en el canto y los cuadrices femorales en el cintón. Además nos ayudará la mano con la que agarramos la escota para sentirnos más apretados al barco, sobre todo en el movimiento de proa a popa.
Si estamos colgados firmemente, sentiremos el barco como una parte de nosotros y podremos actuar en consecuencia. Daros cuenta que un láser pesa 60 kgrs, menos que la mayoría de nosotros. No es tan manejable como un cuchillo, pero si estamos firmemente agarrados a él, podremos transmitir al barco hasta un pequeño movimiento de nuestras pestañas. Es por esto por lo que es tan importante estar físicamente bien, la fortaleza física ayudará a que nos sintamos en todo momento agarrados al barco y no nos relajemos nunca.
Es fácil sentir que el barco ya no es parte de nosotros mismos cuando el cansancio hace que nos colguemos sin tensión y los movimientos del barco nos hagan zarandearnos como una simple antena pegada a él que pandea en cada ola.

¿Y en las popas? Estar agarrado al barco es ahora más difícil, la tendencia es sentarse encima del barco y ya está, pero no, hemos de agarrarnos nuevamente a él, hacer del barco nuevamente una extensión de nuestro cuerpo, nos ayudarán las cinchas, el cintón plástico de la bañera, el agarrarnos con la rodilla y la mano a la orza, incluso agarrarnos a la winche de la escota, cada uno ha de buscar su posición, pero el culo ha de estar pegado al barco y hemos de sentir todo a través de él. Sentiremos un gran poder cuando tengamos esta técnica controlada. La técnica de sentir el barco es mucho más importante que la de remar con la escota.
Según va subiendo el viento es más fácil agarrarnos a él, ya que la potencia del viento nos permitirá tener más libertad de movimiento y la propia escota se convertirá en un punto de agarre.

Ir bien agarrado al barco nos permitirá:
  • Sentir el barco al instante
  • Poder controlarlo con pequeños movimientos
  • Aumentar la sensación de control y manejo de la caña con menos movimientos de esta.
  • Un sentimiento de control y poder dificil de describir.
  • Sentirás también más tu propio cuerpo y aumentarás la concentración.
Así pues a partir de ahora... agarraros bien, o deciros a vosotros mismos USA LA PEDALETA!!!

jueves, 3 de octubre de 2013

Instrucciones


Hace unos meses rescaté una pequeña cámara cuya pantalla estaba dañada convirtiéndola en inservible. Llamé a varios lugares para arreglarla pero me cobraban más de 150 €, cuando la cámara me costó hace unos años 350 €.
Me daba pena tirarla, así que busqué a ver si era posible pedir la pantalla a través de Internet, encontré una web www.gsmserver.es donde venden todo tipo de pantallas y repuestos. El coste de la pantalla era de 27 dolares y el envío de casi 26 dolares, en total unos 42 euros.
Antes de hacer el pago busqué un tutorial de vídeo en el que mostraban como cambiar una pantalla. Juzgué que era sencillo hacerlo, y realicé el pedido.

A las 10 días me llegó la pieza: servicio impecable... y llegó el momento de realizar el trabajo.

Para empezar, me dí cuenta que lo primero que debía haber realizado antes de pedir la pieza, era haber realizado la maniobra de cambio como si ya la tuviera. Eso me hubiera dado seguridad.
No lo hice y el primer atasco que tuve fue conseguir desatornillar los pequeños tornillos que cierran la caja de la cámara. Al final pude solucionarlo con paciencia "y sin utilizar el martillo".
Después seguí el tutorial punto a punto, y realmente todo fue bien, hasta un pequeño detalle, que fue sacar y poner la cinta de conexión de la nueva pantalla en el enchufe de la cámara.
En el tutorial apenas se advierte como lo hacen. Lo vi muchas veces, pero me pasó desapercibido un pequeño movimiento para liberar y a la vez apretar las dos cintas en el enchufe.

A consecuencia de esto intenté una y otra vez meter la cinta pensando que entraba simplemente por presión, Me obcequé y al final lo conseguí pero no llegó a entrar totalmente y la cinta no hacía buen contacto, con lo que la cámara no funcionaba.

Mi cerebro enseguida fue a buscar culpables, seguro que me han dado otra referencia... pero las comparaba y eran totalmente iguales. Seguro que me han dado una dañada... pero todo parecía correcto... La situación dependía de mí y sin embargo, como pasa en el día a día, buscaba los culpables fuera. Hice un cambio de chip.  SURE, I AM WRONG, como puedo resolverlo....

Fue entonces cuando volví al tutorial, amplié el vídeo todo lo que pude y analicé con detalle cada pequeño movimiento, y fue entonces cuando me di cuenta que había una pequeña operación intermedia sobre el enchufe de la cámara donde se introducía la cinta de conexión, casi imperceptible en el video, que yo me saltaba.

Que fácil fue todo entonces. Lo que me había costado casi dos horas, ahora hubiera tardado apenas 5 minutos. Analizando esta anécdota creo que se pueden sacar muchas conclusiones:
  1. El que hace el tutorial da por supuesto a veces pasos que son clave y sin embargo no son relevantes en las instrucciones, (en este caso apenas se veía). Con lo cual quien las sigue, cairá muy probablemente en el error.
  2. la mayoría de las veces hacemos los pasos del tutorial a nuestra manera, creyendo que los hemos interpretado bien nosotros y cuando no funciona, lo achacamos a un error del tutorial. Si pasa con un vídeo, figuraros la cantidad de  veces que pasa con las instrucciones orales.
  3. Si hubiera realizado un entreno antes de pedir la pieza, tendría una seguridad total en el cambio, y evitaría la posibilidad de dañar la pieza nueva como estuve a punto de hacer.

En las regatas siempre seguimos instrucciones. Muchas de estas instrucciones son pasos que hemos estudiado previamente, que tenemos en nuestra cabeza y que pensamos que haremos cuando llegué la ocasión. Pero luego erramos... la mayoría de las veces por no seguir al pie de la letra los pasos marcados.
Cuando navegaba como tripulante construía unas reglas nemotécnicas, para no olvidarme nunca de las funciones básicas que siempre tenía que hacer. Los entrenos sirven además para que todo lo que es mecánico lo sea de verdad. 
Al final estas operaciones resultan tan sencillas que cuando las explicamos o intentamos hacer un tutorial de ellas, nos encontramos con la dificultad de transmitirlas a los que lo hacen por primera vez. Es como explicar como andamos en bici, o como leemos.

El haber cambiado la pantalla de la cámara, me hizo ahorrarme más de 100 €, pero eso no fue lo importante, lo importante es que me hizó sentirme especialmente orgulloso:
  1. Conseguí hacer algo que nunca en mi vida había hecho: Un reto.
  2. Aprender a hacer algo que nunca has realizado te sirve para replantearte como aprender, y a la vez como enseñar.
  3. El haberme encontrado con un pequeño problema me ha servido para conseguir temple, persistencia, paciencia, replanteamiento de lo aprendido, y cura de humildad.
  4. El haber conseguido el objetivo me hace sentir con más autoconfianza.
A todo esto se añade un factor sentimental: Sé que cada una de las fotos que haga con esta cámara tendrán a partir de ahora un pequeño valor añadido, y apretaré el disparador mucho más cariño.

viernes, 27 de septiembre de 2013

AMERICASCUP 2013

Un acontecimiento como la copa américa, en la que se gasta tanto dinero en único en el mundo del deporte y algo increíble en el mundo de la vela.
Solo dos equipos con posibilidades Nueva Zelanda y USA.

Barcos expectaculares, y formato de regata diferentes, más agil, más corto y con más regatas.

Los NZ parecía que lo tenían fácil tras ir 8 a 1 pero no fué así, ya que los americanos consiguieron en la segunda mitad del campeonato un barco más rápido en ceñida y con mucha mejor aceleración en maniobras.

He visionado, en la aplicación (expectacular) que ofrecía la organización gratuitamente para tabletas y smartphones, a través del "virtual" todas las regatas y he tomado notas, para de esta manera tener datos reales de la evolución de la regata.
Me hubiera gustado disponer  de las estadísticas de velocidades medias, máximas, etc. que daban por TV, pero me ha sido imposible encontrarlas y visionar los vídeos para realizar este trabajo es ya para nota. 

He añadido la tabla de datos (la tenéis arriba como foto) donde he trasladado de la mejor manera posible los acontecimientos. (No me he parado en el detalle)

Los hechos son estos:

  1. De las 19 regatas en 10 los NZ llegaron delante a la primera boya.
  2. De las 19 salidas los americanos salen 11 por sotavento
  3. De las primeras 9 regatas, los americanos salen en todas por sotavento excepto en una, sin embargo NZ gana la partida en la primera boya gracias a su aceleración y velocidad por barlo.
  4. Hubo solo dos salidas en el que uno de los contrincantes tuvo mucha ventaja y las dos fueron ganadas por los USA.
  5. Las últimas 10 salidas llega primero a la boya el que sale por sotavento, excepto en una.
  6. En general los NZ ajustaron mucho más el tiempo en la salida, sobre todo en las primeras regatas.
  7. De las 19 regatas, en 12 de las regatas ganó el primer tramo el que salio por sotavento, en el resto de las regatas en que ganó el de barlovento lo hizo por tener mayor velocidad y aceleración y saliendo un poco antes que el de sotavento.
  8. NZ solo ganó 4 regatas de principio a fin,
  9. USA gano 6 regatas de principio a fin.
  10. De 11 cambios de posiciones 9 se produjeron en el tramo de ceñida
  11. En el tramo desde la primera boya a la primera puerta nunca hubo adelantamiento
  12. Solo hubo una regata en la que se produjeron dos cambios de lideradgo.
  13. Los fallos tácticos más grandes los cometió NZ, uno en una de las salidas y otro en una virada en una ceñida. Regatas 17 y 18
  14. las dos regatas más apretadas la 4, la ganaron los americanos y la 11 la ganaron los neozelandeses.
  15. Excepto en una regata, en las demás regatas la posición ya estaba decidida al llegar a la puerta de ceñida.
  16. En la puerta de sotavento los NZ de las 10 veces que pasan detrás de los americanos soló 2 veces toman la misma boya que ellos, las otras 8 veces toman la otra. Es esta misma puerta de las 9 veces que los americanos pasan por detrás de los NZ, 4 veces toman la misma boya que ellos y 5 veces la otra.
  17. En la puerta de barlo se repite la historia: Los NZ de 12 veces que pasaron detrás solo toman la misma boya 2 veces. Los USA de 7 veces que pasan detrás toman la misma boya 4 veces y 3 veces la otra.
  18. 9 de las ultimas 10 salidas, son ganadaspor el barco que entra primero en el box de salida.
Apreciaciones mías:
  1. Los americanos buscaron con más persistencia la salida por sotavento, solo renunciaron a ella en la última regata, y fueron más fuertes y más seguros tácticamente en conseguirlo.
  2. Durante la regata demostraron más consistencia táctica.
  3. La toma de boya de los americanos fue más consistente buscando siempre la boya favorecida aunque implicará tomar la misma que el primero.
  4. Sin duda la mejora de los americanos en el segundo tramo no fue una mejora táctica, siguieron regateando de la misma manera, sino una mejora en la velocidad pero sobre todo en la aceleración, lo cual se notó en las salidas y en las viradas.
  5. Los NZ no mejoraron el barco durante el campeonato, y tácticamente fueron más inconsistentes. acumularon grandes fallos en las regatas finales.
  6. Pese a lo que pueda parecer los NZ fueron muy precisos en las salidas y de 19 regatas llegaron a la primera boya por delante de los USA en 10. Además en las primeras regatas no les importaba salir por barlo, porque tenían más aceleración y salian mejor, pero cuando los americanos mejoraron cambiaron de estrategia y buscaron el sotavento en las salidas y lo hicieron bien.
  7. Aunque parezca una tontería la entrada en el box es definitiva a la hora de conseguir una buena salida. De las ultimas 10 regatas, 9 las ganó el que primero entró en el box.
  8. Creo que los americanos navegaron más al estilo de vela ligera y los NZ más estilo crucero. Hay que decir que USA llevaba a dos medallistas en LASER y uno de Tornado.
La clave de todo está en que diantres hicieron los americanos para que de un día para otro el barco mejorara en velocidad y aceleración de esa manera tan brutal.

lunes, 9 de septiembre de 2013

I was wrong


Antesdeayer, fui a ver una película documental con mi mujer: Searching for sugar man. (una historia increible), mientras tanto estaba navegando estos días el Cto. de catalunya de laser Standar en Vilasar. El caso es que en medio del documental me quede con una frase del inicio de una entrevista: "I WAS WRONG", pese a pronunciarla en inglés, idioma que apenas domino, me pesó, me llegó al alma, y sentí en ese momento la fuerza de esa frase. Extrapolé más tarde, dándole vueltas en mi cabeza que es una de las frases principales para el aprendizaje, y por ello la deje sonando en mi mente, pendiente de dejarla impresa en este blog.

Decir: estaba equivocado es mucho más que pensarlo, es hacerlo publico, es una forma de solicitar el perdón hacia los demás y hacia uno mismo, es darse cuenta de algo, es dejar las excusas aparte, es un gesto tan grande que consigue hacer bueno el error cometido, son palabras que dan sentido a las equivocaciones, es crecer.

Siempre que en mi trabajo o en el acontecer diario, cuando algo ocurre motivado  por un error o equivocación, examino siempre primero si ese error es mio. Si he sido yo el culpable de llegar a esa situación o en que medida lo he sido. Porque mis acciones, son mías y las puedo controlar, pero las acciones de los demás no. Por eso llego incluso a pensar que a veces los errores de los demás vienen motivados por un error mio precedente. De esta manera aprendo a evitar errores o equivocaciones de los demás.

Podría poner muchos ejemplos que suceden en las regatas:
"Voy ciñendo a estribor, y no veo un barco que viene a babor, el tampoco me ve, y al darse cuenta de que colisionaremos vira encima mía haciéndome virar a mí, al virar yo vuelco. El se penaliza, pero mi regata ya se ha acabado..."
De estas situaciones hay muchísimas.

Posiblemente llegarás a tierra y el contrincante se disculpará contigo. Pero tu puedes crecer y decir:
-"Me equivoqué, estaba despistado y tenía que haberte gritado con antelación que tenía derecho de paso. Mi distracción, acabó con un error tuyo que me ha arruinado la regata"
Esta postura de buscar el error en uno mismo y hacerla pública, nos hará crecer y te hará grande frente al contrincante.

Creo que en la clase Laser Master es fácil escuchar esta frase, pero los jóvenes la desconocen. quizás la razón esté en la letra de la canción del video que he añadido.

miércoles, 7 de agosto de 2013

Navegando con la estupidez


Tomo prestada la teoría de la estupidez elaborada por el itlaliano Carlos Maria Cipolla en los años 70, para enfocarlo desde el punto de vista de la competición, que en cierta manera se puede comparar con las guerras.

Cuando vamos a una regata nuestro objetivo es ganar, y eso implica que no solo vale con conseguir nuestro máximo beneficio, sino que por razones competitivas hemos de intentar que el contrario no consiga también ese máximo beneficio.
Esto trastoca este diagrama de la parte superior. ¿Porque?, porque mientras en el día a día intentamos estar siempre en el cuadrante derecho superior en el que todos ganamos, aunque los demás ganen más que nosotros, en la competición no sirve; siempre hemos de buscar obtener más beneficio que el rival o menos perjuicios. Valen pues todos los cuadrantes excepto el izquierdo superior. Así pues en la competición incluso acciones estúpidas pueden llegar a ser beneficiosas. (ser descalificados pero a la vez causarle un daño irreparable al barco contrario por ejemplo)
Si analizas esto tranquilamente, empezarás a darte cuenta de porque a mucha gente no le gusta competir, y entenderás porque si bien la competición nos aporta valores "positivos", también promueve valores negativos y estúpidos. Todas esas personas a las que no les gusta competir, les gusta moverse en sus actividades deportivas en la zona verde de la gráfica.

La zona de beneficio en la competición es la zona derecha de la diagonal pintada de rojo en la gráfica superior. Así pues dentro de los tres cuadrantes de acciones inteligentes, malvadas y estúpidas hay zonas de triunfo. Y hay un cuadrante en el que siempre ganaremos, el de las acciones malvadas.
Todos hemos realizado acciones que se enmarcan en alguno de los cuadrantes, pero no hay duda que algunos deportistas los puedes situar de manera preferente en alguno de ellos: El portentoso (cuadrante superior), el malvado o pillo (cuadrante inferior derecho), el bestia (cuadrante inferior izquierdo), el tonto, buenazo o estúpido y a veces también incauto, vamos el que siempre pierde (en el cuadrante superior izquierdo).

Me diréis entonces, pueden ser los estúpidos y los malvados campeones, yo diré rotundamente si, pero los grandes, los realmente grandes son los que pueden ganar situándose en el cuadrante superior derecho, pero no te quepa duda de que esos son los pocos, los elegidos, los que nacen portentosos, los que tienen más medios, los que entrenan muchas más horas, los que la vida los hace superiores, pero esos campeones saben moverse con destreza si es necesario, al cuadrante de los malvados. Porque es en este cuadrante, donde el objetivo es claro y rotundo: derrotar al contrario más que ganarle.

Así pues si quieres ser ganador, desentierra, según esta gráfica, el hacha de guerra. Sé inteligente pero no dejes de ser nunca malvado.

martes, 11 de junio de 2013

Despacio, pero firme


Desde hace casi un mes tenemos unos pintores que están dejando como nueva la escalera comunitaria del despacho, lo hacen de manera concienzuda, vamos que lo están pintando todo, paredes, techos, puertas, barandillas, etc. Para ello incluso instalan andamios según la conveniencia. Me paro a menudo a hablar con ellos, sobre el trabajo que hacen o sobre otras cosas intrascendentes.
Pero el otro día me quedé impresionado, porque habían pintado una especie de cuadro con colores lisos rodeados de un marco con color dorado. Posiblemente en su día estaba previsto pintar escenas en ellos y por falta de presupuesto se quedaron en simples pinturas monocromas. El caso es que tras pintar el fondo de estos marcos, pusieron un plástico protegiéndolo con tal minuciosidad, que creo que tardaron más en poner esta protección que en pintarlo. Les pregunté porque lo hacían y uno de ellos, el que parece dirige al resto, me comentó que tenían un lema: Despacio pero firme, ningún paso atrás.
Mientras subía al despacho me quedé con la frase, y me dije a mi mismo que quizás esos pintores me habían ofrecido una gran lección en la elaboración de cualquier trabajo.
Así pues ya sabéis, cuando iniciéis un proyecto, aunque no sea pitar una escalera comunitaria, merece la pena plantear y distribuir los pasos a seguir y llegar al destino con paso firme, y quizás el truco de ese paso firme sea caminar despacio.

domingo, 2 de junio de 2013

La percepción del tiempo


El tiempo es una de esas variables mágicas que nos hace sentir que un segundo puede ser inmortal. El tiempo siempre está con nosotros, hagamos lo que hagamos, solo que a veces somos muy conscientes de él y otras veces no.
En la salida de la regata tenemos consciencia de cada segundo. Durante los planéos no parecen ni tan siquiera existir, sintiéndonos en una especie de nirvana eterno.
Está claro que las situaciones y las emociones nos hacen sentir el tiempo de manera diferente. No es lo mismo contar segundos cuando tienes mucha prisa, que cuando estás completamente relajado o en una actividad fluyente. Una regata en la que vas de mal en peor, se hace eterna y otra en la que todo sale bien, vas hacia adelante y ganas, parece una exhalación.
Dicen que cuando somos felices, cuando hacemos algo que nos gusta, cuando trabajamos en algo que nos apasiona, cuando disfrutamos, el tiempo parece evaporarse, simplemente pasa y seis horas parecen que hayan sido unos cuantos segundos. Podéis sentirlo en las regatas, cuando váis bien, cuando disfrutáis de la velocidad, cuando véis que todo sale como lo planificamos, el tiempo se acorta. Sin embargo cuando estamos cansados, cuando las cosas salen mal, cuando el error y el cansancio forman melodía disonante, el tiempo parece no tener fin.
A veces ser conscientes del tiempo, aprender a utilizarlo, nos puede permitir controlar nuestras emociones.

viernes, 26 de abril de 2013

Navega como el Barça


Son muchos los amantes del fútbol, y más los de los grandes equipos, como es el Barça.
Durante estos años, el Barça a estado conquistando títulos, y sino lo hacía, llegaba a las finales o semifinales. 
¿Que le da el poderío al barça, para que siempre esté ahí?
Unos dirán que Messi, indudablemente es y será uno de los grandes, pero uno solo no gana, necesita un engranaje, un conjunto equilibrado, y el barça lo es.
No entro a valorar los jugadores del barça, entre otras cosas porque no entiendo mucho de fútbol, pero hay algo que hace al barça diferentes de todos los equipos:
Su forma de jugar, a creado un estilo, una forma de juego, un proceso o dinámica de mover el balón desde la portería al gol. Y también una forma de defender cuando no tiene el balón.
Pero lo grande del barça no es este estilo de juego, o este proceso de juego, lo grande es que lo sigue al pie de la letra, no importa el minuto de juego, ni el resultado del marcador.
El barça siempre juega igual, ese es su secreto.
A creado un estilo y lo ha depurado a la excelencia, y no prueba otras cosas, porque nadie puede ser el mejor en todos los estilos pero si que lo puede ser en uno.

El jugar siempre igual tiene muchas ventajas:
  1. El equipo se siente seguro con su juego, aunque vaya perdiendo le da seguridad, elimina la incertidumbre y los nervios.
  2. Te permite experimentar siempre dentro de lo que ya sabes hacer muy bien, lo cual te lleva a la excelencia y a la genialidad.
  3. Muestras al otro equipo un equilibrio y serenidad, que les pone nerviosos.
  4. Todos los jugadores saben lo que tienen que hacer siempre y en cada momento, ya que los roles están muy definidos, y eso crea un gran ambiente de equipo, y hace a todos imprescindibles.
¿Como extrapolar esto a la vela?
Simple: Crea un estilo, una técnica, una táctica, una metodología y síguela siempre al pie de la letra. no te separes de ella. Pase lo que pase, aunque vayas ultimo, haz lo que sabes hacer de la misma manera.
He navegado con grandes navegantes, y en cierta manera todos son aburridos, todos son fieles a su estilo y cualquiera de la tripulación podría definirlo. Lo grande de estos navegantes no es tanto ese estilo propio, (que también lo es), sino que, pase lo que pase se mantienen fieles e él. No se suelen poner nerviosos, y en situaciones complicadas hacen lo que saben hacer, siguiendo las mismas pautas y con la misma hoja de ruta.
La genialidad no llega buscándola, llega en la monotonía del estilo propio, cuando se dan las condiciones para ello.

Haciendo siempre lo mismo, das oportunidad a la genialidad, por muchas razones:
  1. Dispones de más energia para resolver situaciones inesperadas porque todo lo haces de una manera prescrita, y no piensas cada movimiento, sino solo los necesarios, los finales, los puntuales y los conviertes en geniales.
  2. Tienes seguridad, sabes que lo que haces, lo haces bien, lo haces como el mejor, o incluso eres el mejor, por lo cual hacerlo te da confianza y aleja los nervios, aporta serenidad, tranquilidad y equilibrio. Fundamental para navegar.
  3. No te vienes abajo nunca. Porque sabes que a veces puede no funcionar, o existir errores, pero la estadística te hace sentir tranquilo en que los resultados volverán tras una mala o desafortunada regata. Si algo va mal, no intentes enmendarlo, simplemente busca de nuevo tu estilo. Es la mejor medicina a la adversidad.
Así pues, Busca tu manera de navegar, una que funcione, crea tu estilo, y sé el mejor, y luego sigue tu estilo al pie de la letra sin titubeos, con fe y seguridad, en todo momento y en cualquier situación.
Sé fiel a tu estilo, Navega como el Barça!!!!

lunes, 8 de abril de 2013

El poder de una tarjeta sin uso


Siempre guardo las tarjetas caducadas de todo tipo, desde las de crédito hasta las federativas. En una de esas etapas de la "tornillería", como decía un buen amigo mío, en el que la puesta a punto del barco se ponía por delante de todo, me mostraron los múltiples usos que pueden tener; uno de ellos y de los más preciados es usarlas como pequeñas espátulas para enmasillar.
Y una de esas tarjetas "áureas", porque esa es la mágica relación entre sus lados, protagonizó el otro día una simple historia, llena de connotaciones transversales.

Regata: L'escala, 8 barcos laser master en la modalidad vela standard y todos de un gran nivel.
No me sentía ni mucho menos el mejor de todos, pero tampoco el peor, y las condiciones no eran malas para mi, ya que un viento suave era benévolo con mis desastrosas condiciones físicas.
De los 8, todos tenían posibilidades reales de podium en cualquiera de las regatas.
El caso es que el sábado, primer día de regata, fue desastroso para mi. Mis puestos fueron 2 penúltimos y un antepenúltimo, ya que hubo un fuera de línea. Pero lo más grave de todo es que mis posiciones iban de delante hacia detrás con una cruel facilidad. Tenía muy claro que era la velocidad del barco la que no me dejaba ningún resquicio para la recuperación, ni para defender simplemente una buena posición y eso me llevaba además por la senda del error, queriendo enmendar lo que era imposible.

Llegué al puerto convencido de que algo iba mal en el barco. Tenía en mi cabeza muchos flancos por lo que atacar, muchos de ellos sencillos y otros complicados. Mi rango iba desde el regulador de las cinchas, a la enfilación entre la orza y el timón, alguna preflexión en la base del palo... todo menos la vela y la parte superior del palo que eran nuevas a estrenar. Me centré al llegar al puerto en el timón, intuía que tenía una holgura tremenda, ya desde hacía tiempo, pero la desidia me volvió sordo.

Al día siguiente aprovechando que no entraba el viento, llegué al puerto con las pocas herramientas que tenía dispuesto a intentar algo. Todos mis contrincantes estaban en grupo charlando y no dudaron en ayudarme y comprobar conmigo la amplitud de la holgura, comparándola con otros barcos y timones.
La holgura parecía producirse en dos puntos: La holgura entre herrajes de macho - hembra del timón, y la holgura de la pala con la caja del timón. Creo que el análisis de las causas y las posibles formas de solucionarlo ocuparon mucho más tiempo que las acciones efectivas que luego llevé a cabo con la ayuda inestimable de todos.

En cuanto a los herrajes pudimos darle la vuelta a una de las hembras que va anclada en el casco, ya que la otra había sido ya cambiada anteriormente. Eso mejoró ostensiblemente esa holgura.
Limitar la holgura entre pala y caja del timón fue más discutido, una lluvia de ideas mías y de mis contrincantes llegaban a oídos del timón. Finalmente opté por una de ellas, no la mía que era muy complicada y imposible de realizar insitu, sin las herramientas adecuadas. La solución era introducir dos trozos de tarjeta a cada lado de la pala del timón y de esta manera al apretar el tornillo que va en la cajera del timón toda la superficie de la cajera presionaba la pala quedando esta completamente fija. Una tarjeta de las caducadas que llevo con el kit de reparaciones me sirvió para ello.

Nos sobró tiempo, ya que el viento, aunque muy poco, tardó en entrar. Corrimos dos regatas, y pese a cometer muchos errores, acabé 2º y 4º. Estaba feliz. Había podido acotar una de las causas de mi falta de velocidad. Posiblemente habrá más, pero una de ellas, y quizás una de las más importantes estaba controlada.

Está historia real tiene mucho de transversal, ¿por qué?
  • Tras un día aciago no debemos quedarnos nunca parados, hemos de buscar los puntos débiles, intentar acotar las situaciones que nos han llevado a ese desastre. Y cambiar algo. En mi historia tuve la suerte de acertar, pero también hay que decir que en la mayoría de las ocasiones siempre se acierta, ya que pocas veces las causas son únicas y aisladas.
  • De todas las posibles causas empieza por la sencillas, posibles y fáciles de llevar a cabo.
  • Solo la idea de cambiar algo psicologicamente influye en tu cabeza.
  • Todos mis contrincantes me ayudaron, de manera decisiva en resolver la situación a mi favor. Gente simple pensaría que porqué lo hicieron si salían perdiendo, pero la realidad es que todos salimos ganando. Se puede competir y ayudarse mutuamente. Eso fortalece al grupo, hace mejor al menos bueno y mejor también al que va mejor. Y crea un sentido de grupo que pocas cosas pueden romper. Haz mejor al que está a tu lado y tú tendrás más posibilidades de ser mejor.
  • Una simple tarjeta caducada, que suele acabar en la basura. adquiere de repente una función para la que no ha sido diseñada, cumpliendo con creces las solicitaciones necesarias. También nosotros servimos para más cosas de las que los demás nos hacen hacer. Sólo hay que estar ahí y esperar la oportunidad. Nunca te tires a la basura, aunque ya estés caducado.
Sí, me sentí contento por haber mejorado, pero mi mejor regalo fue sentir el grupo. Su ayuda apasionada y desinteresada. No cambio mi historia, que también es vuestra, por el podium.
Gracias compañeros!!!

sábado, 2 de marzo de 2013

SCRA


Hace unos días, por razones de trabajo me entero, o al menos redescubro, el término S.C.R.A.
Es una sigla o acrónimo de Síntoma, causa, remedio y acción, y es una metodología que se utiliza en el ámbito de la calidad para la resolución de problemas triviales así como en la investigación de accidentes e incidentes. Cuando el problema es de mayor embergadura o complejidad se usa el diagrama de ISHIKAWA o de cola de pez, del que ya hablaremos en otro post.

Por que os doy la vara con el SCRA, pues porque me parece un método sencillo que cualquiera puede utilizar tranquilamente en casa sobre situaciones que nos suelen suceder en las regatas y que no son deseables. Solo se necesita papel y lápiz, y ganas de no repetir situaciones indeseables.

¿En que se basa este método?, Se puede hacer solo, pero siempre es mejor ayudarse del entrenador o de otros regatistas, por ejemplo con los que naveguemos asiduamente.
El análisis se base en:

  1. SINTOMA: Es el incidente ocurrido, por ejemplo salir mal, haber tocado boya de barlovento, volcar en la popa...hemos de clarificar que?, quien? donde? cuando? como?
  2. CAUSA: Análisis de las causas que han producido el incidente. Hemos de repetirnos hasta 5 veces el porque y anotarlas todas. En este análisis de causas se puede ir hacía atrás, por ejemplo he volcado porque me resbalé, me resbalé, porque había lavado la bañera con jabón, lavé la bañera con jabón porque me los dejó un amigo.
  3. REMEDIO: Propuesta de soluciones y en este punto debemos estar abiertos a pedir ayuda.
  4. ACCIÓN: Concretar propuestas de actuaciones muy detalladas que nos permitan elaborar un plan de acción para evitar que vuelva a suceder.
Todo el proceso es lógico, facil e intuitivo, pero sirve sobre todo para establecer unas acciones que nos hemos de comprometer a realizar. Esa disciplina nos permitirá evitar esos incidentes, y evitar comportamientos erróneos repetitivos que solemos cometer en las regatas.

Pon un SCRA en tu vida.



sábado, 23 de febrero de 2013

las 22 leyes inmutables para ganar regatas


Cuando conocí a mi mujer, que trabaja en el mundo del marketing, curioseé en su biblioteca y encontré un libro "fácil" sobre marketing titulado: "Las 22 leyes inmutables del Marketing".
Se lo que estáis pensando, suena a libro de auto ayuda, y sí, realmente lo es, uno más de esos miles de libros en formatos diversos de cuentos, historias o simples leyes donde re-ordenan y adornan lo que todos sabemos.
Me he acordado de ese libro 16 años después, lo he releído y adaptado transformando las leyes del marketing a las leyes de la regata.

  1. El lideradgo: Es mejor ser el primero que no ser el mejor. Cuando llega una nueva disciplina olímpica, el que empieza antes a practicar, a ir a regatas, tiene ya una ventaja sobre los que llegan más tarde. No es lo mismo comenzar a practicar un deporte a los 4 años que a los 20. Aunque el que empiece 20 años más tarde sea infinitamente más apto para ese deporte siempre estará en desventaja. A niveles más corto-placistas, el empezar primero a probar una nueva vela, el primero que tiene un entrenador privado, el primero que usa un nuevo estilo de navegar, el primero que ensaya una táctica, el primero que recibe una ayuda federativa, etc. también tendrá ventaja.
  2. La categoría: Si no puedes ser el primero en ceñida, sé el primero en las popas. Cada regatista puede ser consciente que quizás no es el mejor en ceñidas, o en velocidad de barco, a de buscar otra categoría dentro de la regata en la que pueda destacar y ser el líder. Por ejemplo dominar en la táctica, o dominar en el reglamento, en salir, en navegar en largos, etc. Este nuevo liderazgo le aportará mejores rendimientos y más rápidos que estar intentando sin éxito, desbancar al líder de las ceñidas.
  3. La Mente: Ser el primero en tu mente, mejor que llegar primero. Él que se sitúa en la mente de los contrincantes como el mejor, tiene siempre más probabilidades de ganar. Has de sentirte bueno, el mejor dentro de tu nivel para poder enfrentarte a los que tienes al lado, sino siempre estarás cediendo el puesto, al que tu piensas que es mejor que tu.
  4. La percepción: La regata es una batalla de percepciones. La verdad suele acercarse a la percepción de un experto. Pero cada uno tiene una percepción suya y única de lo que pasa en las regatas, o mejor dicho su regata. No somos dueños de las percepciones de los demás, pero cuando la mayoría van por una lado del campo de regatas, en el 90% de las situaciones no se equivocan. Regatear bien implica mejorar nuestra percepción de lo que pasa en nosotros, nuestro barco, y nuestro entorno. Pero también es muy importante tener en cuenta las percepciones de los contrincantes y también del jurado o comité... y saber usarlas a nuestro favor.
  5. El enfoque: Reducir el campo de acción de nuestras acciones. No somos dioses para poder hacerlo todo y mejorar en todo en la misma dimensión. Es muy importante planificar los puntos en los que podamos mejorar más, dejando ahí la mayoría de nuestro tiempo y energía. Si ya navegamos bien en ceñida, en lugar de seguir entrenando ceñidas en cada entreno, seamos más incisivos en donde fallamos más; por ejemplo las salidas, la toma de boyas o las trasluchadas.
  6. La exclusividad: No hay dos regatistas que definamos de la misma manera: Si definimos a los buenos regatistas que tenemos cerca diremos: Antonio, un crack en las salidas. Pepe, una bestia ciñendo con viento. Juan, inalcanzable en las popas. Siempre hay espacios en esa exclusividad que podemos intentar ganar para nosotros mismos, en lugar de intentar arrebatársela al que ya la tiene en su dominio.
  7. La escalera: La estrategia a utilizar depende del nivel que tengamos en la escalera. Todos somos conscientes del peldaño que ocupamos en la parrilla de salida, por los antecedentes, nuestro peso y condiciones, el material, los recursos, etc. Es fundamental establecer una estrategia que permita dar el máximo rendimiento a nuestros recursos para poder saltar un escalón de esta escalera previa a cualquier regata. Y no confundamos estrategia, con planificación o táctica.
  8. La dualidad: A larga las regatas suelen ser una carrera de dos. Supongo que influyen multitud de factores, entre ellos el psicológico, pero en todas las competiciones suele haber un lider y el que va detrás. A la larga se pelean casi siempre dos por ganar, y curiosamente suele pasar en todas las dimensiones de la vida. Esta ley da medida de lo importante que es estar delante y de lo difícil que es para los demás superarle.
  9. Lo Opuesto: Si tu pelea es por el segundo puesto. tu estrategía está determinada por el primero. Está claro que el líder va por delante, seguramente por medios, por condiciones, etc. Con lo cual el será el que tenga preferencia con el fabricante de palos, de velas, etc. lo cual condicionará nuestras posibilidades de elección y estrategia. Y muchas veces, por no decir siempre, solo queda la opción de elegir lo opuesto. A nivel de una regata por ejemplo, el que va primero tiene la opción de posicionarse en el campo de regatas dejándole al segundo solo la otra opción: la que queda, que normalmente es la más penalizada.
  10. La división: Con el tiempo las categorías se dividen. En los inicios de una competición siempre hay un líder que suele ganar en todo: ceñidas, popas, viento, brisa, etc... con el tiempo van apareciendo especialistas que hacen que una competición con poco viento tenga unos líderes probablemente diferentes a una regata con rasca.
  11. La perspectiva: Los efectos son a largo plazo. Poco que añadir. Si pensamos que llegar a la cima es un tema de días, vamos mal. El camino para ser el primero es largo. Y aquí interviene la planificación con una perspectiva clara de lo que queremos en plazos razonables.
  12. La extensión: Presión irresistible a extender nuestros éxitos. Una vez que conseguimos ser los mejores en ceñidas, querremos ser los mejores en popas, y después los mejores en salidas, y poco a poco iremos dispersando quizás la ventaja competitiva que teníamos con nuestros contrincantes.  Hemos de controlar está extensión de nuestras habilidades para no perder las ventajas iniciales que nos permitían ser líderes con facilidad en unas condiciones determinadas.
  13. El sacrificio: Siempre hay que renunciar a algo para conseguir algo. Renuncio a explicarlo, para que lo entendáis.
  14. Los atributos: Para cada condición hay un contrincante líder. Se enlaza con la Ley 6. la tendencia es siempre a relacionar a cada regatista un liderazgo según las condiciones o el tramo de recorrido.
  15. La franqueza: Admite algo negativo de ti mismo y tus contrincantes lo verán como un punto fuerte. Ser franco y honesto, te mantendrá siempre delante en las cabezas de los contrincantes como un ganador aun habiendo cosechado un mal resultado. Las disculpas, o mentiras te permitirán ganar una regata pero no ser el líder. Hay grandes regatistas, incluso con medallas de oro, que no disfrutarán nunca del respeto y veneración de los que han competido con él. Y ese es un premio mayor que cualquier medalla, solo accesible a los más grandes.
  16. La singularidad: En cada situación, solo una jugada producirá efectos importantes. Esta ley sirve, para la planificación, la estrategia y la táctica. Ante una situación hay muchas alternativas que tienen efectos positivos, pero solo una la más audaz puede producir un resultado sustancial. La audacia, es siempre, un golpe inesperado para el contrario e implica valentía. Pero esta valentía solo se convertirá en audacia si va acompañada previamente de entreno, técnica y fuerza.
  17. Lo impredecible: Salvo que regatees en el lugar de todos tus contrincantes, nunca podrás predecir el futuro. Nadie conoce el futuro, y jugar a ser adivino suele tener malas consecuencias. Pero eso no quita ser conscientes de las tendencias de nuestro entorno, lo cual nos muestra un panorama de posibilidades y nos dará cierta ventaja respecto a nuestros competidores. Aprovecharse de las tendencias: sí, jugar a ser adivino: no.
  18. El éxito: El éxito suele preceder a la arrogancia y la arrogancia al fracaso. El éxito nos roba objetividad, nos roba horas de entreno, nos roba concentración... pero aun así, es más fácil gestionar el éxito que el fracaso. Necesitas ganar para volver a ganar.
  19. El fracaso: El fracaso debe ser esperado y aceptado. Reconocerlo, remediarlo y seguir adelante es la clave para remontarlo.
  20. El engaño: Las situaciones suelen ser lo contrario de la información que nos llega. No nos creamos todo lo que dicen de lo que hay a nuestro alrededor, la información de nuestros contrincantes, del campo de regatas, de las velas, etc. Informaciones que pueden proceder de rumores, o hechos no constatados no aportan más que incertidumbre. Busca siempre acercarte a la verdad, no hagas caso a los rumores o apreciaciones de los demás.
  21. La aceleración: El triunfo no se apoya en novedades sino en tendencias. La novedad es una ola y la tendencia la marea. La ola es muy visible pero se amortigua enseguida. La marea apenas se percibe pero es implacable. Busquemos las tendencias, no las modas. Hagamos de nuestro recorrido deportivo una tendencia, no una breve ola.
  22. Los recursos: Sin dinero, una idea no despega del suelo. Cualquier planificación requiere recursos que al final se mide en euros. Sin dinero, los 21 puntos anteriores se quedan en pura prosa.
En fin, frases hechas al fin y al cabo. El próximo reto será llevar al campo de las regatas otro libro de este tipo que circula por mi casa desde hace tiempo que se llama "No te preocupes, gana dinero".

lunes, 4 de febrero de 2013

Lo más importante para ganar


Figuraros que frotáis la lámpara de Aladino y os sale un genio que os dice:
 - Te daré lo que quieras para que puedas navegar mejor.
¿Que le pediríais?: Un barco nuevo, un entrenador, poder ir a más regatas, tener más finura de caña, salir mejor, más velocidad, etc. todo esto y mucho más te lo da algo que se llama DINERO.
Por muy poéticos que queramos ser, por mucho que nos guste que el pequeño se coma al grande, que el débil pueda con el fuerte. Lo más importante en la vela, como en cualquier otro deporte competitivo es el dinero.
Sólo cuando se llega a niveles similares de inversión y condiciones en dos equipos es cuando el dinero pasa a un segundo plano, eso si se mantiene el fair play, porque sino el dinero sirve para comprar árbitros, doparse en el limite de lo permisible o no permisible, y en otros terrenos que es mejor no entrar, pero que en la alta competición existen y están ahí.
Podéis coger cualquier deporte y siempre el dinero está presente en los ganadores. Les permite no solo obtener los mejores medios para conseguir las cosas, sino además una motivación extra.
El dinero lo compra todo, al mejor deportista, el mejor  material, la innovación, la motivación, te hace listo, la vestimenta.
Esto son hechos, que en el mundo amateur apenas se nota, pero en el profesional lo es todo.
Así pues una de las virtudes que ha de tener un buen deportista profesional es saber conseguir dinero.
¡¡¡¡Hombre, no es para tanto, que el dinero no es lo más importante!!!
Le decía yo a un buen amigo mio, y el me respondía:
No claro que todo, hay muchas otras cosas más importantes, ¡¡¡¡pero son carísimas!!!!