miércoles, 2 de enero de 2019

Gestinar la ansiedad


La psicología siempre ha estado presente en nuestra vida, pero han sido las guerras, y el mundo de la empresa las que exprimido su estudio.
El desarrollo profesional del deporte en los últimos años ha derivado hacia este terreno la importancia de su puesta en escena. Si bien antes se extrapolaban los conocimientos adquiridos por la psicología en otros ámbitos hacia el deporte, ahora es al revés y se utiliza el desarrollo de la psicología deportiva en los ámbitos personales, educativos y profesionales.

La psicología básica ha sido desarrollada desde la antigüedad, pero hoy las herramientas disponibles son mucho mejores, y su importancia en cualquier actividad es vital.

Unos días atrás, leía este artículo "Como entrenar la mente para gestionar la ansiedad", y dejo aquí un pequeño resumen de lo que posiblemente ya todos sabemos, pero que solo el entrenamiento diario nos permite asumirlo y lo encaro hacia el deporte de competición.

La primero, y quizás lo más importante es ADMITIR LOS FRACASOS y tras ellos DARNOS NUEVAS OPORTUNIDADES. Esto que parece tan sencillo no es nada fácil.

Todos sabemos que nosotros mismos somos nuestro peor enemigo. El saboteador interno está siempre trabajando para minarnos nuestra propia confianza… y hay que estar atento para desplegar nuestras armas contra nosotros mismos.

Esas armas son:
-          Fijar los objetivos (claros y asumibles)
-          Retomar lo bueno de nuestro pasado para saber que lo podemos repetir.
-          Confiar en el trabajo y esfuerzo realizado, y en nuestro talento.

Y que pasa cuando llega la ansiedad, el miedo, la angustia y la presión. Es vital usar unas cuantas herramientas que hemos de entrenar: 
  1. Conseguir la calma a través de la respiración
  2. Trabajar el relajamiento.
  3. Y trasladar nuestra atención en lo que hacemos, solo en lo que hacemos, excluyendo el resto de pensamientos. ES LA ATENCIÓN PLENA.
Si nos llegan malos pensamientos, transformarlos en buenos, imaginar siempre un futuro amable en lugar de otro amenazante. Pensar siempre que tanto el pasado y el futuro no existe únicamente está en nuestra cabeza, lo único que existe es el presente.

Y en cualquier cosa que hagamos separar dos ámbitos esenciales:
 - Que parte del presente PODEMOS CONTROLAR
 - Que parte del presente NO podemos controlar.

Olvidarnos de lo que es imposible controlar, simplemente aceptarlo y centrarnos en lo que si podemos controlar actuando con energía, calma, alegría, fuerza, inteligencia…. si hacemos todo esto, que no es poco, no hace falta que nos obliguemos a nosotros mismos a disfrutar, simplemente disfrutaremos, fluiremos.